La capacidad que tenga el docente de llegar a su alumnado determinará de forma directa los resultados obtenidos por estos. El maestro debe contribuir al florecimiento del alumno y servirle como apoyo y guía a lo largo de su proceso de enseñanza-aprendizaje. En caso de que se exista una mala relación entre profesor y estudiante, el canal de aprendizaje se vería dañado, es necesario que antes de poner el foco en la transmisión de conocimientos, nos aseguremos primero de haber creado un buen clima en el aula que nos permita lograr un alumnado motivado, con interés y actitud activa, que confía en nosotros, y no tiene miedo al error, ya que después los aprendizajes vendrán solos. A continuación os dejo aquellas cualidades que considero indispensables en nuestro ejercicio como futuros docentes.
1. RESPONSABLE
Un maestro supone un modelo a seguir para sus alumnos, por ello debemos ser cautos en nuestros comportamientos, y actuar y enseñar en base a aquellas actitudes que pretendemos obtener de vuelta por parte del alumnado. Un ejemplo de responsabilidad como docente también sería implicarnos en nuestro trabajo para así llevarlo a cabo de la manera más adecuada y significativa posible. Es decir, prepararse la dinámica, la metodología y el desarrollo de cada una de las clases y actividades que se vayan a realizar.
2. FLEXIBLE
Hace referencia a la capacidad para poder adaptarnos, reaccionar y actuar ante los cambios e imprevistos que nos pueden surgir en momentos determinados de la manera más adecuada posible. No obstante, resulta esencial que como maestros seamos organizados y responsables a la hora de planificar y estructurar nuestras actividades y métodos, sin embargo, también es importante mostrarse receptivo a la hora de planear nuevos planteamientos ante alguna posible variación de los acontecimientos.
3. CREATIVO
Está demostrado que para que un aprendizaje resulte significativo debe ir acompañado de alguna emoción, hacernos sentir algo para que el recuerdo perdure en el tiempo. Un buen maestro debe conseguir despertar la curiosidad de sus alumnos por cada uno de los contenidos a enseñar, planificando actividades lúdicas, motivadoras y originales para de este modo evitar que nuestro alumnado caiga en una posible monotonía que provoque que la adquisición de los contenidos resulte pesada y aburrida, debemos conseguir que nuestros alumnos vengan cada día a clase con ganas, ilusión e interés por aquello que estudiemos en cada caso.
4. COOPERATIVO
Como docentes tenemos una profesión en la que tratamos de forma continua con factor humano, ya sea con nuestros propios compañeros y demás equipo del centro, las familias, los alumnos, etc. Por ello, resulta esencial que contemos con las habilidades sociales necesarias para poder desempeñar nuestra labor de la manera más sencilla y eficaz posible. Además, el trabajo en equipo nos resultará esencial para facilitarnos el trabajo y enriquecernos con las aportaciones y el pensamiento de las personas de nuestro entorno, para así obtener los mejores resultados.
5. INNOVADOR
Es importante que en nuestra profesión no caigamos en el error de acomodarnos, de limitarnos a dar los contenidos que vienen en el libro únicamente a través de las actividades y recursos que este nos proporciona, por ello, debemos conocer y poner en práctica diferentes métodos, estrategias y herramientas para poder aprovechar al máximo los recursos de los que disponemos, y darles de este modo las máximas salidas posibles.
6. INSPIRADOR
Un profesor inspirador es aquel que impregna a sus alumnos de la energía, la actitud y la luz que irradia e incluso de sus propias experiencias, sin basarse únicamente en la enseñanza de los contenidos que marca el currículo. Para ello, es importante que nuestros alumnos nos sientan como alguien cercano, en quien puedan apoyarse y confiar y sobre todo en quien se puedan inspirar para el desarrollo de su personalidad.
7. RESOLUTIVO
Un maestro resolutivo es aquel capaz de sacar mil soluciones distintas para un mismo problema, que cuenta con la creatividad y la voluntad de hacer frente a cualquier tipo de situación. Un ejemplo podría ser el docente que se había preparado el día anterior una clase, con su correspondiente presentación, un vídeo con el que realizar después varias actividades, etc., sin embargo, el proyector no funciona. Un maestro resolutivo encontraría distintas opciones basándose en diversas metodologías con las que poder sustituir e incluso mejorar, el método de enseñanza para esos determinados contenidos.
8. EMPÁTICO
Ser empáticos nos resultará esencial para poder aplicar aprendizajes individualizados y adecuados a cada uno de nuestros alumnos, en base a sus necesidades, capacidades, situación familiar, etc. Un docente empático se pone en el lugar de sus alumnos y entiende sus posibles limitaciones o dificultades en una situación determinada.
9. HUMILDE
Un docente humilde es aquel consciente de que su labor consiste en enseñar a sus alumnos, pero también en aprender de ellos y de cada uno de los momentos y experiencias que nos van a regalar, aquel que no se cree superior a los niños, sino como un igual con las mismas ganas de aprender y de impregnarse de la filosofía y las aportaciones de cada uno de ellos.
10. MEDIADOR
Al desempeñar un trabajo que requiere el contacto continuo y permanente con diferentes personas, debemos estar preparados y contar con las herramientas y estrategias necesarias para conseguir una convivencia sana con los diferentes miembros de los que se compone la comunidad educativa, así como para resolver de la manera más adecuada posible los conflictos con los que nos podamos encontrar o en los que podamos vernos involucrados.
11. OBSERVADOR
Interesarnos por conocer a nuestros alumnos/as, tener empatía para entender sus problemas y necesidades, así como conocer el origen o punto de partida de cada uno de ellos nos puede ayudar a conseguir un proceso de enseñanza-aprendizaje más eficaz en el alumnado al ser conscientes de cuáles son sus capacidades, necesidades, limitaciones, etc. para a poder así adaptar nuestras enseñanzas. Un docente observador sería aquel capaz de detectar situaciones precarias en sus niños como un posible caso de maltrato en el que actuar sea una cuestión de emergencia, debemos estar atentos a cada uno de los signos que nos pueden dar pistas de que algo puede no estar yendo bien para así actuar con la mayor rapidez y eficacia posible ante este tipo de situaciones de emergencia.
12. CARISMÁTICO
La profesión docente es un trabajo que requiere de muchísima vocación, y, por tanto, es una labor que no todo el mundo está capacitado para realizar ya que, gracias a ella, conseguiremos captar la atención y el interés de nuestros alumnos por aprender y descubrir nuevas cosas. En el caso contrario, conseguiremos que estos odien o aborrezcan ciertos contenidos o materias. La actitud lo es todo, si queremos interés y receptividad por parte de nuestros alumnos, nosotros también debemos transmitirlo.
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